LA PANTHÈRE ELIXIR DE CARTIER ES UN ACORDE ADICTIVO QUE TIENES QUE PROBAR
Por: Daniel Zepeda
Imágenes: cortesía de la marca
“Toda mujer posee una faceta femenina, y toda flor alberga en su corazón notas animales”. Con estas palabras, Mathilde Laurent, perfumista de Cartier, invita a descubrir La Panthère Elixir, una adictiva variación de su icónica fragancia floral felina. Este perfume, enriquecido con un toque embriagador de almizcle leonado y un jazmín aterciopelado, promete envolver en la sofisticada seducción de la Maison a quien lo use.
LA PANTHÈRE ELIXIR: LA ESENCIA DEL FELINO
Desde su lanzamiento en 2014, la fragancia de La Panthère ha dejado una huella única en el mundo de la perfumería. Con su acorde chipre fusionado con un floral felino sin precedentes, Cartier ha redefinido lo que significa una fragancia floral contemporánea. Mathilde Laurent, visionaria detrás de esta creación, ha querido capturar en La Panthère Elixir la esencia de la pantera: un símbolo histórico y poderoso de la Maison Cartier desde 1914, cuando apareció por primera vez en un reloj decorado con el emblemático motivo de manchas.
La evolución de la pantera como símbolo de Cartier fue impulsada por Jeanne Toussaint, directora creativa desde 1933. En 1948, esta creadora imaginó al felino en tres dimensiones, un acto de audacia que consolidó el vínculo entre la pantera y Cartier, dotando a la Maison de un emblema fuerte y lleno de carácter. Hoy, con La Panthère Elixir, Laurent continúa esa visión, reinterpretando el felino no solo en aroma, sino también en tacto y forma, como si la piel suave de la pantera se transformara en una caricia de terciopelo cálido.
UN ACORDE EMBRIAGADOR Y ADICTIVO
La Panthère Elixir no es una simple variación del Eau de Parfum original. Laurent ha introducido nuevos matices que elevan la experiencia olfativa: lirio, ámbar y jazmín añaden profundidad y riqueza a la composición. Estas notas danzan juntas, formando una estela que equilibra fuerza y delicadeza, que evoca la dualidad de la pantera, poderosa y seductora. Mathilde Laurent ha recreado un universo sensorial completo, donde el almizcle leonado y el jazmín aterciopelado se encuentran para ofrecer una experiencia cálida e hipnótica. Con esta creación, la nariz de Cartier busca acercarse tanto a la suavidad del felino como a la delicadeza de una joya viviente, logrando una fragancia que permanece como un sello atemporal en la piel.
UN DISEÑO INSPIRADO EN EL ARTE PRIMITIVO
La presentación de La Panthère Elixir refleja también el espíritu de la fragancia. El frasco, con líneas curvas que recuerdan la cabeza de una pantera, adopta un diseño Art Déco que evoca las primeras representaciones del felino en la Maison. Este diseño, además de ser un tributo al emblema de Cartier, añade una conexión visual y táctil con la fragancia. El frasco recargable no solo es una apuesta estética sino también un compromiso con la sostenibilidad, fortaleciendo la unión entre la Maison Cartier y su legado.
En definitiva, La Panthère Elixir es una invitación a explorar la fuerza y el misterio de un perfume que encarna la dualidad femenina, el lujo y la intensidad del emblema de Cartier.